Fuera de lugar
Y con una obra manipuladora por parte de algunos políticos que han querido aprovechar un filón mediático.
¿Rectificación? No, en todo caso ACLARACIÓN. Cualquier persona que conozca un poco a José Ángel Biel y la razón de ser del Partido Aragonés desde hace 30 años, creo que no tendrá ninguna duda respecto al discurso político en referencia a un posible trasvase del agua del Ebro.
En su intervención, lanzó la pregunta de si "sería posible utilizar en la costa mediterránea el agua que llega al mar, en un punto fuera de la cuenca del Ebro sin generar derechos concesionales en el futuro". Según explicó, cuando el agua llega al Mediterráneo, "hay un momento en que sigue siendo dulce" antes de convertirse en salada, y su cesión "no generaría concesiones administrativas" por estar fuera de la cuenca del Ebro.
Esta propuesta supondría retrasar la toma más allá del Delta del Ebro, ya que "la transferencia de recursos de una comunidad a otra limita el crecimiento de la cedente" en beneficio de otra, algo que considera "muy grave".
También ha puntualizado que en Aragón sólo sobrará agua mientras no se realicen las obras de regulación "pendientes desde hace 100 años" -la Ley de 1915, el Pacto del Agua de 1992 y su actualización de 2007-, tras las cuales duda de que queden más de "cuatro litros". En concreto, de los 50.000 hectómetros cúbicos anuales que registra el caudal del Ebro, 11.000 están sujetos al régimen concesional y el resto, a mantener su caudal ecológico y a la reserva hídrica.
Biel ha subrayado en un comunicado que su partido "se ha opuesto, se opone y se opondrá mientras exista a cualquier trasvase del Ebro", puesto que "no existen caudales sobrantes que permitan" hacerlo.
Tras la polémica suscitada por las declaraciones de Biel, el Partido Aragonés "censura las declaraciones realizadas por algunos dirigentes políticos, que desconociendo el contexto y la literalidad de las palabras del presidente han pretendido sacar rentabilidad electoral de algo inexistente".
La "posibilidad" apuntada por Biel se refería a la captación de aguas en el Mediterráneo, en las cercanías de la desembocadura del Ebro, "y siempre fuera de su cuenca" y sin generar derechos concesionarios. El PAR precisa que las manifestaciones de Biel en un foro empresarial de Valencia "han sido descontextualizadas", puesto que el presidente del partido "ha defendido con rotundidad su oposición al trasvase del Ebro desde la negación de excedentes, lo que imposibilita cualquier transferencia entre cuencas" y "siempre ha defendido el derecho de Aragón a poder regular y utilizar las aguas que discurren por su territorio".
El partido defiende que Biel sólo pretendía pedir "imaginación" a los políticos para resolver un "problema enquistado desde hace treinta años" y subraya que la propuesta de captación de aguas en el mar "nada tiene que ver con un trasvase, que sí supone un derecho concesionario y cercena la capacidad de desarrollo de la cuenca cedente".
"En todo momento se habla de agua captada en el mar, que en un proceso similar a la desalación pudiera ser una alternativa", insiste el PAR, que añade que "el planteamiento ha sido una forma de rebatir aquellos argumentos que aseguran que cada año el Ebro vierte al mar miles de hectómetros sin que se puedan utilizar".
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